A medio camino entre nuestra tortilla de patatas y una quiche o una pizza, la frittata es un plato típico italiano muy versátil y al que se le puede añadir casi de todo: resto de verduras variadas o pasta de otra comida, patatas, carne, queso, cebolla frita, etc. Es ideal como entrante, cena ligera, o para llevar en el tupper al trabajo, además de ser una opción de aprovechamiento, nutritiva y económica.

Foto: ndsu

Ingredientes para unas 4 personas y precio total aproximado: 3,08€

2 patatas nuevas medianas (0,4€) ó patatas cocidas sobrantes

1 manojo de cebolletas frescas (1€)

1 calabacín mediano (0,64€)

100 g de espinacas frescas (1-2 puñados) (0,33€)

6 huevos (0,65€)

2 cucharadas de aceite de oliva virgen (0,06€)

Una pizca de pimentón picante

Pimienta negra, una pizca de sal marina

Unas hojas de albahaca fresca

Elaboración:

En primer lugar lavamos bien las patatas y las cortamos en rodajas, conservando la piel. Las cocemos en agua con sal hasta que estén hechas, pero enteras, sin que se deshagan. O mejor aún, las cocemos al vapor con una pizca de sal y pimienta.

Lavamos el calabacín y con ayuda de una mandolina lo cortamos en láminas muy finas.

Hacemos un sofrito con 1 cucharada de aceite, las cebolletas cortadas en láminas finas y el calabacín. Lo dejamos a fuego medio, removiendo de vez en cuando. Rehogamos la verdura junto con el aceite de oliva hasta que esté transparente y un poco dorada.

Añadimos las espinacas frescas (también pueden ser congeladas), el pimentón y una pizca de sal. Dejamos rehogar unos minutos más hasta que las espinacas empiecen a menguar.

Aparte, con la otra cucharada de aceite de oliva, calentamos una sartén sin mango (ó que se pueda meter en el horno) o un molde antiadherente hasta que el aceite esté bien caliente.

Batimos los huevos, los sazonamos con sal y pimienta y añadimos los huevos batidos a la sartén caliente.

Bajamos el fuego y extendemos por encima la mezcla de verduras y patata como si de una pizza se tratase.

Tapamos y dejamos cocer a fuego suave unos 5 minutos hasta que el huevo esté bien cuajado, sin darle la vuelta a la sartén. Como el huevo no tarda mucho en cuajar, de ahí la importancia de cocinar previamente las patatas o verduras a emplear.

Mientras tanto calentamos el grill del horno y en el último momento doramos la frittata por arriba, en la misma sartén, sin darle la vuelta, hasta que el huevo esté dorado.

La servimos caliente o fría con unas hojas de albahaca fresca.

Podemos variar las verduras al gusto, quedando muy bien también con espárragos, tomates cherry asados, brócoli, berenjena, champiñones, o variando las especias y añadiendo tomillo, salvia, orégano fresco, etc. y añadiendo queso por encima.

Ø  Propuestas de aprovechamiento de los alimentos para no desperdiciar