Por su agradable sabor y
colorido, por ser ricas en ácido fólico y vitamina C, por aportar muy pocas
calorías y ser fáciles de digerir, entre otras virtudes, las fresas se
convierten en la reina de las frutas desde enero hasta mayo. Aunque solas y
recién lavadas es como mejor se aprecia su sabor, desde Cocinar Rico y Sano
todos los años proponemos alguna receta con esta fruta tan apetitosa y que da
tanto juego en la cocina.
Ø Crumble
de fresas sin gluten
Foto: thedutchbakersdaughter.com |
Ingredientes para unas
4 personas:
½ kg de fresas
2 manzanas
1 naranja
1 cucharada de maicena
1 cucharada de azúcar moreno
Crumble:
100 g de harina de trigo
sarraceno
100 g de harina de almendras
100 g de azúcar moreno
Una pizca de sal
100 ml de mantequilla o aceite
de oliva suave
Unas gotas de esencia de
vainilla o 1 cucharada de azúcar vainillada
Elaboración:
Lavamos las fresas y las
cortamos en rodajas.
Pelamos las manzanas y las
cortamos en láminas finas.
Mezclamos la fruta en una
ensaladera junto con el zumo de naranja, un poco de ralladura de naranja y el
azúcar. Lo dejamos macerar un ratito mientras preparamos la masa.
En un bol amplio o ensaladera
mezclamos las harinas, el azúcar, la vainilla y la sal. Añadimos al final la
mantequilla den daditos o el aceite. Vamos integrando la grasa con suavidad con
ayuda de los dedos, pero sin mezclar demasiado, para conseguir pequeñas migas
que luego darán un resultado crujiente.
Colocamos la fruta en pequeños
recipientes individuales para horno y cubrimos con la mezcla de harinas.
Horneamos a unos 160º durante
unos 40 minutos, o hasta que la fruta burbujee y el exterior esté ligeramente
dorado.
Servimos templado.
Foto: reciperunner.com |
Preparamos un batido con
fresas limpias y troceadas y frutos rojos al gusto (pueden ser congelados), un
poco de leche vegetal y unos dátiles (según dulzor deseado).
Aparte, reservamos y enfriamos
bien 1 vaso del agua de cocer los garbanzos (sin sal), le añadimos una pizca de
cremor tártaro, y un sobre de azúcar vainillada. Batimos con varillas durante
unos 6-8 minutos con ayuda de un robot de cocina hasta que quede firme como el merengue.
Una vez que este bien denso, le añadimos unas cucharadas del batido de fresas hasta
conseguir un suave tono rosado. Servimos el batido con esta espuma por encima y
decoramos con una brocheta de arándanos o una fresa.
Ø Otras
recetas:
Taboulé con
fresas: Después de añadir el tomate rallado, podemos añadir
trocitos de fresas en sustitución del tomate picado.
Tiramisu de
fresas: Podemos añadir un poco de puré de fresas a la mezcla de
queso y entre las capas de queso y bizcocho incluimos rodajas finas de fresas.
Podemos sustituir parte del azúcar por estevia.
Mermelada
cruda de fresas y chía: Muy rápida de preparar y muy saludable.
Por: Lati
Escudero
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