Tiernos
y esponjosos, y sin azúcares ni grasas, son ideales para un desayuno o merienda
saludables, al sustituirse parte de la harina por boniato y avena, alimentos ricos en fibra, betacarotenos
y minerales. Similares a unas tortitas, se pueden acompañar de dulce o salado.
Foto: Pixabay |
Ingredientes
para unos 8-10 gofres:
2
boniatos pequeños o 1 grande, asado
4
huevos
100 g
de copos de avena (aprox 1 vaso)
175-200
g de harina (aprox 1 vaso y medio)
¾ de
vaso de leche o bebida vegetal
2
cucharaditas llenas de levadura química en polvo
1 cucharadita
rasa de canela molida
Ralladura
de naranja
Una
pizca de sal
2-3
cucharadas de miel (opcional)
Para
acompañar: mermelada, nata, plátano, sirope de arce…
Elaboración:
Lavamos los boniatos y los
asamos hasta que estén blanditos. Los dejamos enfriar.
Los abrimos por la mitad y
vaciamos la pulpa con ayuda de una cuchara.
En un bol amplio introducimos
todos los ingredientes y trituramos con ayuda de una batidora.
Si queremos que queden algo
dulces, añadiremos la miel, de lo contrario la omitiremos.
La masa debe quedar bastante
espesa, ajustaremos la cantidad exacta de harina o leche para conseguir la
consistencia deseada.
Calentamos la gofrera a
potencia máxima, y cuando humee engrasamos bien con un buen chorro de
aceite de oliva (especialmente con el primer gofre ya que puede que éste se
pegue o rompa) y añadimos una cucharada de masa.
Tapamos y dejamos cocer un minuto y medio aproximadamente, hasta que el gofre tenga un ligero tono dorado. Lo ideal es emplear un tenedor de gofres para sacarlos sin que se rompan.
Tapamos y dejamos cocer un minuto y medio aproximadamente, hasta que el gofre tenga un ligero tono dorado. Lo ideal es emplear un tenedor de gofres para sacarlos sin que se rompan.
Foto: Isabelle @ Crum |
Servir calientes o extenderlos
individualmente sobre una rejilla hasta que se enfríen. Se pueden congelar
posteriormente en bolsitas individuales para ir sacándolos según sea necesario.
Si no disponemos de gofrera,
podemos hacer tortitas en una sartén.
Podemos acompañarlos con una
nuez de mantequilla y un chorreón de sirope de arce, a modo de tortitas, o mermeladas o compota de manzana. También podemos acompañarlos de pechuga de
pavo, queso, etc…
Además, al no llevar grasa, si
nos apetece un capricho, podemos permitirnos el lujo de añadir en alguno un
poco de nata montada o una bolita de helado…
Ø Para
saber más:
Por: Lati
Escudero
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