Con motivo del día de San Valentín que hace poco hemos pasado, nuestra nutricionista Lati Escudero nos propone esta semana, obsequiar a los que más queremos con una tarta refrescante y ligera, que además puede ser una buena elección en caso de que nuestros comensales presenten intolerancia al gluten o lactosa.
Foto: tartalimon_dietasana
Ingredientes:
-Para la base:
100 g de avellanas
100 g de dátiles (unas 12 unidades)
100 g de copos de avena (*certificados sin gluten)
30 g de aceite de coco derretido, si estuviese solidificado
-Para el relleno:
400 ml de leche condensada sin lactosa
200 g de crema de tofu
3 limones
1 sobre de agar-agar en polvo
4 cucharadas de agua
100-150 g de frutos rojos variados frescos o congelados
Elaboración:
En primer lugar preparamos la base.
Para ello trituramos, con ayuda de un molinillo o robot de cocina, hasta obtener un polvo fino, las avellanas, la avena certificada sin gluten y los dátiles juntos.
Lo pasamos a un cuenco y le añadimos el aceite de coco derretido, mezclamos bien y lo extendemos en el fondo de un molde desmontable. Funcionará muy bien si empleamos un molde desmontable de silicona.
Horneamos la base durante unos 15 minutos a unos 160º y la dejamos enfriar. También podemos prepararla el día anterior.
Ahora preparamos el relleno. Ablandamos en un cuenco amplio la crema de tofu hasta que quede cremosa. Añadimos a continuación la leche condensada y mezclamos bien. Podemos añadir ralladura de limón (preferiblemente ecológico) según gustos.
En un pequeño cazo, disolvemos el agar agar en el agua y añadimos el zumo de los limones que habremos pasado por un colador. Lo llevamos a ebullición a fuego lento durante 2 o 3 minutos y lo incorporamos a la mezcla de la leche condensada rápidamente, mezclando bien con unas varillas.
Extendemos esta crema sobre la base de horno bien fría.
Añadimos por encima los frutos rojos y dejamos enfriar la tarta varias horas en refrigeración antes de servirla.