2 vasos de leche
1 cucharadita rasa de azúcar
vainillada
4 yemas de huevo
2 yogures naturales cremosos
2 aguacates grandes ó 3 pequeños maduros,
pero que conserven bien su color.
El zumo de ½ limón
Elaboración:
1. Separamos las yemas de las claras y reservamos las claras para otros usos.
Colocamos las yemas en un bol junto con el azúcar y batimos hasta obtener una
crema.
2. Preparamos un recipiente amplio con hielo para enfriar, donde podamos
introducir un cazo.
3. En un cazo calentamos la leche hasta llevarla casi a ebullición. La
apartamos del fuego, la colamos y, una vez que se ha enfriado ligeramente en el
hielo, vertemos un poco de leche en la mezcla anterior de las yemas. Removemos
bien, y echamos esta mezcla, pasándola por un colador, en el resto de leche.
4. Calentamos de nuevo la leche a fuego lento, removiendo constantemente, hasta
que la crema espese y al levantar la cuchara, ésta salga cubierta por una
película formada por la mezcla. Esta última preparación no debe hervir, ya que
puede cortarse.
5. Enfriamos de nuevo en el hielo, removiendo a menudo para que no forme nata
en la superficie.
6. Aparte, batimos los aguacates y el zumo de limón con la batidora hasta
obtener una pasta. Lo añadimos a la mezcla anterior, junto con los yogures
naturales. Mezclamos bien e introducimos en un recipiente adecuado para
congelar, batiendo a menudo, hasta que el helado cuaje. Cuando la crema esté un
poco solidificada, añadimos el chocolate en virutas.
También podemos emplear una heladera.
7. Servimos con un poco de leche condensada por encima y opcionalmente, algunas
virutas más de chocolate.
8. Para conservar el helado, antes de que solidifique del todo, lo pasamos a
un recipiente plastificado, para facilitar su empleo posterior.
9. Opcionalmente, si nos gusta el toque mentolado, se pueden añadir también unos
after-eight troceados.
Por: Lati Escudero